La nueva colección de Carmen Rodríguez está inspirada en una tierra marinera, su olor a marisma, a salitre, sus colores, el color de la arena de la playa, del agua del mar, lanzando una mirada hacia atrás, a los vestidos de las inglesas de las compañías mineras que poblaban las playas de Huelva en los veranos de principios del siglo pasado.