Margarita Freire plasma en cada una de sus colecciones su estado emocional. Este año, ha querido dedicar su propuesta a su futura hija, ‘Carmen’, nombre de su abuela paterna con el que la bautizará, inspirada así en una mujer admirable y luchadora. El resultado es la creación de un vestido fresco y más ligero que en ocasiones anteriores. La diseñadora recurre bastante a los vestidos cortos, con mangas cortas y tirantas, pensadas en la feria de día o la romería, pero sin perder el sello de una firma caracterizada por los trajes trabajados en su justa medida para la mujer elegante y sensual.